miércoles, 16 de septiembre de 2009

5º mes Fin de las vacaciones

Lo bueno se acaba y aunque en Sabarís me lo estaba pasando bomba (a pesar de echar mucho de menos a los abuelitos de Madrid) papá y mamá decidieron volver a casa, a Madrid, a pasar mogollón de calor y a que papa fuera de nuevo absorbido por ese ordenador maligno.
Me dió mucha penita marcharme así que dí un beso muy fuerte a los abuelos, a la tita Isabel y el marinero Vitín, a la bisa, a Geles, los primitos Victor y Blanca, a Estrella y también a una nueva amiguita llamada Gloría. ¿Sabéis quien es Gloria? Pues bien, es alguien muy especial: es la persona que cuidaba a mi papá y mis tios cuándo eran pequeños como yo y juntos se lo pasaban muy pero que muy bien. Me encantó conocerla porque después comí fenomenal ¡menuda cocinera! y lo mejor de todo, me pude enterar de todas las travesuras de papá cuando era un peque como yo ¡ji ji! Os dejo una fotillo del momento:


Ya en Madrid me vi bastante aplatanado por tanto calor y me echaba unas siestas de campeonato que me duraron hasta que algo molesto le ocurre a mi encia inferior ¿qué me estará pasando?¿por qué babeo tanto? Papá y mamá no saben como consolarme y tengo que confesar que a veces me pongo muyyy pesadito.
Novedades!! Ahora, como ya soy muy mayor duermo solito en mi cuarto y en mi fantástica cuna de chico grande. Estoy encantado porque puedo dar vueltas y vueltas y ponerme de lado y bocaabajo ¡Ah! ¡Qué todavía no os lo he contado!! Mis bebe-avances más importantes han sido:
1º Me doy la vuelta cual croquetilla yo solo, sí, cojo fuerza y me pongo primero de lado y luego boca abajo y luego si quiero me vuelvo otra vez boca arriba. Esto requiere mucho esfuerzo y concentración pero cada vez me sale mejor y con mayor facilidad.
2º Como aguanto mucho la perola puedo estar bastante tiempo sentadito (apoyado en algún sitio como el sofá, parezco un marajá de esos).
3º Adiós capazo!Hola silla de chicos mayores. Pues eso que mamá y papá decidieron que ya era lo suficientemente grande como para pasarme a la silla aunque toda tumbadita, me encanta aunque para echarme la siestecita creo que era mejor el otro invento...
4º Me encanta el baño porque ya no tengo miedo del agua, por el contrario me encanta dar patadas fuertes fuertes contra ella para que salga volando y salpique a mamá o papá ¡Qué divertido!
5º Empecé con uno pero como me gusto tanto seguí practicando y ya soy capaz de cogerme los dos pies con estas manitas rechonchas, un gran descubrimiento ¡si señor!

Y para despedir el verano y nunca mejor dicho porque cómo cambio el tiempo en estos últimos días mis papas me llevaron nada menos que a Granada ¡qué ciudad más preciosa!. El motivo principal era ver a unos muy buenos amigos de mis papás: Daniel y Ave, y lo mejor es que tambien estaba Miguelín, otro amigo recién llegado de un sitio muy lejos llama Malasia. A Daniel (¡guau! ha querido llamarse como yo) ya le conocía pues vino a verme aprobechando unos 10 minutos que tenía libres en Granada, a Ave sin embargo como vive muy lejos en London o algo así no me había dado tiempo de ir a visitarla (ya sabéis la agenda tan apretada que tengo). Como mis papás querían salir con ellos de fiesta me dejaron por primera vez con una canguro o al menos eso me dijeron porque para ser sinceros yo no vi ningún canguro en la habitación del hotel, quizás vino mientras yo dormía... Ave me cayó muy simpática y me trajo un montón de regalos, un mono precioso y un montón de cuentos en inglés a ver cuando mis papás me los leen porque yo todavía no sé aunque como voy a ir a la guarde seguro que aprendo pronto.

Y hasta aquí las novedades, bueno no, ahora como duermo mucho menos que antes mis papás me ponen alguna vez en la tele baby Einstein, unas imágenes con muchos colores y música que me tiene entretenido unos minutejos.

En mi 5º cumpleaños mi mamá estaba tan liada que se olvidó comprar una tarta para que yo soplara las velas ¡que desastre!. A cambio me dieron regalitos ¡cómo me gusta la bolita sonora! y me dieron muchos muchos besitos. Pesaba unos 7,300 Kg y medía 65 cm, estoy hecho un campeón.

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